El 13 de febrero falleció Lillian Bassman a los 94 años, reconozco que su nombre no me decía nada, después de leer el artículo que le dedicó El País, me puse a buscar sus fotos y aparecieron trabajos que había visto una y otra vez en diferentes revistas y reportajes de moda, fotografías en blanco y negro de mujeres elegantes y sofisticadas.
Aquí resumo una parte del artículo que le dedicó El País y la web www.talcualdigital.com:
Su talento la llevó a posicionarse como
una de las más importantes fotógrafas de moda del último medio siglo es,
además, uno de los ejemplos más claros de mujeres que, en los años 40 y
50, pudieron compatibilizar su labor artística con el ciudado de una
familia.
Nació en Brooklyn el 15 de junio de1917,
proveniente de una familia de intelectuales judíos libre-pensadores
inmigrantes, creció en un ambiente que le permitía vivir como una mujer
independiente y no convencional.En 1935 contrajo matrimonio con el,
también, fotógrafo Paul Himmel.
Estudió y trabajó como diseñador textil e
ilustrador de moda antes de trabajar en Haper’s Bazaar con el todopoderoso director de arte Alexey
Brodovitch, donde llegó a ser directora artística y promocionó a Richard Avedon, Robert Frank, Louis
Faurer y Arnold Newman, llegando a convertirse en fotógrafo.
Según los expertos las calidades más notables de su trabajo
fotográfico son los altos contrastes entre luces y sombras, la ausencia
de grano en sus fotos acabadas y los ángulos geométricos de colocación
de la cámara y los temas. También utilizaba recursos técnicos
como el flou vaporoso, el tiraje mediante reducción o la exposición
selectiva.Sus imágenes de moda son únicas,
alcanzando su efecto a través de la manipulación en el cuarto oscuro.
Por los años 70, se dio cuenta de que su
estilo de fotografía no casaba con el actual y abandonó la fotografía
de moda, volviendo a sus propios proyectos y destruyendo la mayor parte
de sus negativos y copias de 40 años de trabajo.
No
volvió a la moda hasta la década de los 90 cuando fue redescubierta,
sobre todo en Europa. Su último trabajo lo hizo para la revista Vogue en
2004.